Últimos ajustes antes de comenzar la ruta, comprobando las suspensiones (presión y rebote, básicamente)
Llegando a Chandebrito, en breve comienza lo mejor de la mañana
Primer obstáculo, ¡¡¡¡esas motossss!!!!!!
Parece que el personal anda un poco dormida, tanto andar por carretera se pierde el filin al monte (es lo que tiene tirarse 7 meses al año en la carretera y sólo 5 en el monte)
Poco a poco la gente le va cogiendo el tacto a las bicis de ruedas gordas
Últimos metros de la mañana, pocos kms. pero de calidad que es lo que cuenta
Primera salida con el grupo de invierno "club Roeirasa", somos todos los que están, pero no están todos los que somos, siempre hay alguien que se queda dormido.
Nadie quería ser el guía, así que intenté hacer una ruta sobre la marcha, pero el resultado no estuvo a la altura de los bikers, será por que no soy bueno improvisando rutas. pero parecía más bien que el personal estaba cansado, o que faltaban Eloy y Fernando, los que animan todas las salidas con sus ocurrencias....
Al final no salieron muchos kms, pero para ser el primer día de contacto con el monte todo mojado por las últimas lluvias, que dejaron éste bastante pesado, resbaladizo, lento.... no estuvo mal del todo (todos catamos el suelo)
Último día de quedada con los BTT Roteas, a partir del próximo domingo saldré con los del club Roeirasa al cual pertenezco, éstos se dedican al asfalto en verano
Como no podía ser de otra manera, siempre empezamos subiendo, será para quitarle las ganas de madrugar a alguno? (a mi por ejemplo, jajajajaja)
Después de llegar a Chandebrito, nos vamos a Vincios
Vaya por Dios, el pelotón se corta en dos grupos, hay que esperarrrrrr, a que tanta prisa, la comida se puede calentar en el micro!!!!!
Después de solucionar un pequeño problema, a alguien se le ocurrió romper la cadena, seguro que fue para descansar un poco, continuamos hacia Morgadanes
Subimos al Galiñeirooooo!!!!!!, que bien, mi lugar preferido, y no es por bajarlo, que también, es por subirlo
Y subimos......
Bajamooooossssss.....
Quedamos cortados, no esperan por nadie, así dejaron a otros dos en el Galiñeiro, a saber si ya llegarían a casa a día de hoy